AUTORA: Agatha Christie
NOTA: 4/5
SINOPSIS:
Poirot debe vérselas con un complicado caso: Emily Inglethorp, una acaudalada anciana, muere tras terribles convulsiones y se desvela que ha sido asesinada con estricnina. Las sospechas recaen sobre su nuevo esposo, un hombre veinte años más joven en quien la familia de la muerta no confía ni un ápice. ¿Los indicios? Un misterioso testamento destruido, una taza de café rota, una mancha de cera y un parterre de begonias recién plantado. Muy poco para cualquiera, a menos que se trate del genial detective belga Hercule Poirot.
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Mrs. Inglethorp es una vieja anciana amable que invita a su casa a todo aquel que lo necesite. Ésta acoge a Hastings, un amigo de su hijastro John Cavendish. Tras algunos sucesos poco importantes que no me merece la pena de mencionar, Mrs. Inglethorp muere. ¿La causa? Envenenamiento por estricnina. Todo apunta a que ha sido su viudo marido Mr. Inglethorp pero no todo es lo que parece. ¿Conseguirá Poirot desvelar el misterio? Pues sí. Eso todos lo saben. Al final todo se arregla siempre excepto en los cuentos de Óscar Wilde que todos mueren al final de las historias, o al menos en los que yo he leído (un libro con 6 cuentos. 6 cuentos = 6 o más personas muertas. Hay que veerr...).
Todavía no sé como hace Mrs. Christie (xD) para engancharme tanto a sus libros y ni mucho menos sé como hace para liarlo todo de una manera que al final lo desenreda y el asesino no era ni mucho menos quien te esperabas.
Me encanta como se cabrea Hastings con Poirot por no contarle nada de lo que piensa del caso. También me encanta la petición de matrimonio que hay (no digo más de eso) y la bonita pero rara historia de amor de John Cavendish y su mujer.
No puedo decir mucho más del libro ya que me lo leí hace tiempo. Pero hay un lío montado...
